jueves, 26 de julio de 2007

DEUX TETES

Por ahora sin comentarios

lunes, 23 de julio de 2007

Amateur

O apetur, como rebauticé en algún momento a esta palabra... Ojalá pudiera hacer esto diariamente, unir todas las veces que pruebo y quedar como una experta.



Gracias OR-lik!

HAPPINESS

Recuperar la felicidad es recuperar la niñez a través de los que todavía participan de ella. Había un programa en la TVE que se trataba de chicos que decían cosas insólitas, muy cómicas y desquiciadas. También hay una sección en la revista Selecciones (hace mucho que no tengo una a mano, la leía en la quinta de mis abuelos en Ezeiza y recuerdo que apenas entendía lo que decía) que citaba los disparates que salían de la boca de hijos de los lectores. Creo que la revista Viva de Clarín también tiene una página o recuadro con ese tipo de decires.
Yo por suerte lo tengo Elijah, el hijo de Cecilia. Dentro de poco cumple cuatro años y trato de guardar cada una de sus "valientes nuevas palabras" en mi memoria.
El otro día se le presentó al electricista que fue a arreglar unos cables a su casa y le dijo: "Me llamo Elijah y no me gustan las montañas rusas" (y jamás se subió a ninguna, la que debe haber visto debe haber sido en esa propaganda de Colgate -una tomada de pelo-, entiendo por qué le debe tener miedo a esos gusanos giratorios).
Para Eli los pájaros "volan" y cada vez que se enoja conmigo y quiere que me vaya me dice "vayate". Sus vecinos son "oficinos" y la otra vez que lo fui a buscar a un cumpleaños -en el que de una pared salía el cuello con cabeza de una jirafa- cuando salimos a la calle Elijah corrió hasta el otro lado de la pared para verle las patas y la cola al animal.
Hay muchas cosas que ahora no puedo traer al presente, ya las voy a ir anotando de a poco. Mi hermano subió un video a Youtube. Yo lo comparto con quien quiera.
Esos son algunos de mis abrazos de felicidad, que me hacen acordar que un día yo también fui así y que todo eso forma parte de mi historia.

domingo, 22 de julio de 2007

What is this all about?

Si existe el eterno retorno, si todo vuelve a un mismo punto, ¿por qué el mayor tiempo y espacio que se transcurre es infeliz? Envidio a la gente ingenua por acapararse de la felicidad sin comprender que pronto vendrá un mal momento. Celo a aquella gente porque literalmente acaparan un mundo feliz y no permiten que vuelva a ingresar en las órbitras del eterno retorno de las demás personas. Y entre estas me encuentro yo.
Si la felicidad dependiera de uno mismo y de su perspectiva a la hora de observar el mundo, las pequeñas cosas, entonces podría ser feliz incluso con un hombre golpeador. ¡Qué suerte la mía no haberme topado con él aún! Sería feliz con él por el simple hecho de que la felicidad depende exclusivamente de mí.
Me niego a creer en tal conformismo. Y solicito a los ingenuos que dejen caer por su ruta algún pedazo de aquella estúpida felicidad, que la devuelvan a la órbitadeleternoretorno para que al menos yo, y algunos más a quienes conozco, podamos disfrutar de tales boberías y simplezas.
Yo también quisiera ser simple y descansar en un solo punto de la órbita de Nietzsche, en aquel donde era niña y la felicidad era algo corriente y ordinario.

sábado, 21 de julio de 2007

iami!

Una de las mayores delicias que descubrí en los últimos años fue la comida. La comida con paladar francés y actitud romana (de la época de Nerón o Julio César). No hay nada como el salmón, crudo. Como las alas del pollo o el lomo a la pimienta. También es indescriptible el sabor de los fideos con salsa Galli, queso envasado, pan y cocacola. ¿Qué hay de los panqueques con dulcedeleche, de la palta convirténdose en guacamole, de los chizitos kellogs y el submarino? Me fascina el pulpo, sus tentáculos, riñones embadurnados con limón, espinaca cruda con tomate y milanesas de pollo de la nona. El salmón crudo. La pizza casera, los pochoclos, los sugus y la tarta de jamón & queso con azúcar sobre la masa. La tarta de brócoli de Malina, el lemon pie de Karol, la chocotorta. Papas fritas de todo tipo, incluso las Pehuamar con quesocremamezcladoconsopadecebolla. Pollo a la cacerola, el de BEBA. Papas al horno y papas a la crema... Sándwiches, TODOS. Choclos en verano en invierno y en otoño.
Gracias Rulo por tu receta.

viernes, 20 de julio de 2007

Answers

¿Existe la semi-felicidad/semi-infelicidad? No sé por qué razón, cada vez que me hago una pregunta existencialista -en este caso en realidad me la hizo un amigo- imagino la respuesta de Or-Lik, antes me venía a la mente la voz de mamá (si se quiere, súper yo o lo que sea). Pero ahora aparece la voz de Horacio, tal vez porque tenga las mismas inquietudes que yo, o los mismos sufrimientos (que a veces me gustaría reemplazarlos por "surferismos", es decir por montadas de olas gigantes lejos de la realidad de la tierra); o tal vez por el simple hecho de que compartamos un lugar muy próximo en nuestra generación y seamos de géminis (grave problema, mamá también es del mismo signo pero yo no creo "tanto" en eso así que deja de ser un inconveniente). Basta de preludios.
¿Que si existe la felicidad/infelicidad a lo "semi"? Seguramente. Claro que sí. El hecho está en que yo no soy de este estilo, no soy "semi", soy de un lado o soy del otro, me cuestan los grises y cada vez me gusta menos ese color. Puede ser un problema, un big problema.
Hace poco descubrí que mi color favorito era el azul marino, un poco tarde, me tendría que haber dado cuenta un par de años atrás, pero entonces mi color sería el rosa y... Adoro los oscuros y adoro los blancos. Adoro reír mucho y siento cierto placer en tener ratos muy desdichados.
Hace poco Floppy me comentaba en el 111 que tenía sus bajones, tenía la sensación de que estaba deprimida y de que era pesimista. Yo le decía que ahí estaba la base de la existencia y que si uno estaba dispuesto a vivir "profundamente" debía aceptar esa parte del trato, que no es gratuita claro, porque se trata de sufrir. Quien no existe no sufre; quien no sufre no existe. Quien sabe lo que es sufrir la existencia (ser consciente de ella, dejo los males sociales de la pobreza y la injusticia para otro momento, ahora me refiero más a un mal cultural si se quiere llamar) sabe lo que es disfrutar la existencia, aunque esos momentos lleguen más esporádicamente y no estén siempre al alacance de uno.
También pienso que tiene que ver con la edad, las inquietudes, los proyectos, las rupturas y el crecimiento de los huesos. Eli, de quien ya hablé, tiene un papá, un abuelo y un bisabuelo muy altos. Con sus tres años hay veces que llora porque le duelen los huesos, literalmente; entonces tiene que acostarse en la cama y tomar algún calmente para chicos. Cecilia y yo nos quedamos tranquilas, porque sabemos que por culpa de/gracias a tiene esos dolores, porque sabemos que son necesarios para crecer. Y aunque en esto caigo en una metáfora más que aburrida -sobre todo por la manera de elegir los términos-, los dolores de hueso son la parte del crecimiento. Y a mí constantemente me duelen los huesos del pensamiento, del corazón, los huesos de mi futuro y a veces de mi presente. Supongo que es porque están creciendo.
Creo que semi-infeliz soy cuando no me dan los tiempos con las cosas que tengo que hacer, cuando no estoy con la gente que quiero todo el tiempo que quisiera, cuando alguien me molesta o cuando me duele la cabeza. Semi-feliz soy cuando cumplo con las obligaciones, con las cosas que la gente espera de mí. Pero esa no soy yo, porque no me gusta el color gris.
Es divertido poder decir todo esto. Aunque se trate de un paréntesis dentro de todo un dolor de huesos.