martes, 24 de mayo de 2016

Comer flores




Siempre quise, pero nunca pensé que lo iba a hacer desde el borde de mi cama, donde me esperan dos libros, una película, el mundo del whastapp con mis contactos en el nuevo continente. Hoy fui al mercado "ecológico" -como se lo llama en España- a comprar frutas y verduras orgánicas. Así me encontré con estas flores amarillas. "¿Puedo probar un pétalo?", me animé. "¡Claro! Pero coge una flor entera para sentirle el gusto, verás que pica un poco". Y así, por dos euros me compré un ramo entero. Están en agua en la cocina, como si fuera un florero, pero hoy las estoy comiendo en mi plato de arroz yamaní (acá se llama "arroz redondo integral") y verduras salteadas. Sigo leyendo a Néstor Palmetti*, gran guía en este momento para sanar mi cuerpo y cambiar mi alimentación. Los intestinos, el hígado, los riñones. Mis intestinos, mi hígado, mis riñones. Estoy aprendiendo a querer cada órgano, a amarlo y cuidarlo. Aunque la tentación esté a la vuelta de la esquina. Pido al Cielo que me dé fuerza y constancia para autosanarme.
La que compré hoy se llama Capuchina enana y vale la pena googlearla para encontrar las miles de propiedades que brinda, además de darle un gusto riquísimo a mi plato, como un rabanito suave, ¡muy rico!
También compré manzanas, papaya, moras, paltas, cebollas, remolacha, semillas de girasol y de calabaza, tomates y unas zanahorias color beige que no me acuerdo el nombre. 


*Los dos libros que estoy leyendo de N. Palmetti son Depuración corporal  y Alimentación deportiva. De Kier.

No hay comentarios: